Control y desarrollo del niño sano.

ESTOS APUNTES HAN SIDO TOMADOS DEL MANUAL DE PEDIATRIA

 EN ATENCIÓN PRIMARIA para residentes.  DE LOS DRS. Javier Sánches Ruiz-Cabello

y José Manuel García Puga.

                        

TABLA DE DESARROLLO (0-5 AÑOS) HAIZEA-LLEVANT

Control y desarrollo del niño sano.


La protección de la salud es un derecho fundamental de los ciudadanos que empieza desde la más tierna edad. El niño recién nacido es el primer eslabón de una cadena de cuidados.
Y también una obligación de sus padres en procurarla consultando a su médico.

Cráneo del niño en sus primeros meses de vida.

Los niños deben ser controlados por su médico o pediatra desde el momento en que vienen al mundo.


Controles.
La salud es un tesoro que bien merece la pena conservar y reforzar.
En estos controles tratan aspectos de la alimentación y nutrición.
Se buscan determinadas patologías.
Se valoran el desarrollo y crecimiento.
Las fontanelas descubren su desarrollo oseo, según su abertura.

Una correcta vacunación prolonga la salud y evita muchas enfermedades..
También es necesaria una correcta alimentación. El control del peso es fundamenta. El exceso de peso es un mal augurio para la salud. Pidale consejo a su médico para llevar una alimentación adecuada,  Todos los niños son diferentes, lo que es bueno para unos, puede que no lo sea para otros.

La infancia y la adolescencia, son dos periodos en los cuales el crecimiento y el desarrollo, están sometidos a frecuentes cambios y variaciones. Además de las posibles desviaciones de la normalidad, se pueden encontrar patologías suceptibles tanto de detección como de corrección. Igualmente, los hábitos y las medidas preventivas van a ser muy importantes de encauzar, pues variar conductas en el adulto es difícil.
De ahí la necesidad de controles periódicos a determinadas edades.

Los objetivos de estos controles son:
unos son de índole global, como es la valoración del niño tanto individualmente como en sus relaciones con el medio y otros más específicos según la edad, haciendo incapié en  búsqueda de patologías, o bien refuerzo de hábitos, conductas, o pautas de higiene o alimentaria, etc., etc.
Estos controles están normalizados según la tabla de HAIZEA LLEVANT que se expone a continuación:
El niño es una máquina perfecta, pero a veces llega con alguna desviación de lo normal, que hay que descubrir desde los primeros momentos de su vida; por ello debe ser revisado al nacer, concienzudamente, por la comadrona, la enfermera/o, o el, o la pediatra. Estos cuidados deben continuar hasta la edad escolar. En la actualidad estas atenciones continúan con el programa de salud escolar hasta la adolescencia.

Anamnesis.
Percentiles.

Recogida de información que aportan los padres o bien informe del hospital u otros profesionales. Antecedentes familiares, personales y de la evolución del niño entre visitas. Preguntas claves.
Objetivos, unos serán de índole global, como es la valoración del niño tanto individualmente como en sus relaciones con el medio y otros más específicos según la edad, haciendo hincapié en búsqueda de patología/s, o bien refuerzos de hábitos, conductas o pautas a seguir de higiene o alimentación.

Todos estos datos son importantes para que el profesional pueda hacer una guía que sus padres deben llevar al pie de la letra.

Aspectos fundamentales de alimentación y nutrición.
Será prioritario la lactancia materna, ya desde  los primeros controles se aconseja esa alimentación, para posteriormente continuar con una alimentación complementaria, hay que crear unos buenos hábitos alimentarios para conseguir una buena nutrición.

Exploración.

En general, la exploración ha de ser siempre completa. Realizarla intentando descartar patologías de origen cardio circulatorio, renal, locomotor, órganos de los sentidos...y dentro de la exploración muy importante valorar el desarrollo neurológico y psicomotor con los hitos fundamentales de cada edad como sostén cefálico, sedestación, sonrisa afectiva, deambulación... 

Detección y prevención.
Vacunaciones.
Momentos en que es necesario intentar hacer emerger posibles problemas, como: hipotirodismo o errores metabólicos, alteraciones de caderas, incluso hasta la deambulación, etc.,etc. e igualmente la prevención en diferentes edades y en grupos de riesgo de: raquitismo, ferropenia, protección solar, las infeciosas a través de las vacunas.

Educación para la salud. En los centros de salud.

En este último punto se realizan una serie  de tareas informativas con los padres para fomentar hábitos saludables evitándo tabaco en el medio ambiente del niño, tóxicos (alcohol, otros), sueño, posición para dormir, alimentación, prevención de enfermedades infecciosas, prevención de accidentes y preparación para próximas visitas, así como aliviar con respuestas a sus preguntas y dudas. 

En los lugares donde no hayan estos centros es muy práctico seguir la TABLA HAIZEA LLEVANT,  que se adjunta acompañando este texto.

Los padres deben estar al corriente de sus hijos, deben recordar los cambios que su niño experimenta para comunicarselo a su médico; para ello tiene esa tabla que le recordará punto por punto cada uno de los parámetros que son los datos que necesita el pediatra.
Vea la columna donde dice padres y haga lo que le ha dicho el médico, que debe ser algo muy parecido, aunque cada niño es un mundo aparte que requiere conductas especiales. Hay niños que necesitan unas atenciones y otros requieren otras.

ESTOS APUNTES SOLO PRETENDEN QUE SU HIJO SEA  MAÑANA UN HOMBRE O MUJER SANOS, POR ESO LE RECOMIENDA HACER LO QUE LE DIGA EL MÉDICO, Y LE OFRECE ESTA GUÍA PARA AYUDARLE.

UN NIÑO SANO NO TIENE QUE SER NECESARIAMENTE UN NIÑO GORDITO.

LA SALUD NO ESTÁ ASOCIADA A LA CARNE.